Consolidación del Festival Flamenco


Comenzaba el verano del 81 cuando es elegido nuevo presidente Antonio Rodríguez Vera, “Hogacero”, que llega con una idea fija en su mente: Consolidar el Festival Flamenco. Recordemos al respecto que las primeras ediciones de este Festival habían sido patrocinadas bien por particu1ares, bien por la propia Peña — pero reduciendo al mínimo el número de artistas—, o por alguna improvisada empresa que actuaba “por la taquilla”.

 

Con estas premisas, el nuevo presidente pretende implicar al Ayuntamiento en un acontecimiento de tipo eminentemente cultural, como él pretendía que fueran considerados estos festivales; para apoyar su tesis se basaba en los ejemplos de localidades vecinas, como Marchena o Morón, que ya venían aplicando este sistema de organización con evidente éxito de crítica y público.

 

El Ayuntamiento de Paradas, aun conociendo el tremendo esfuerzo que suponía un acontecimiento de tal envergadura, se hace partícipe en la idea y, a partir de 1983, patrocina una serie de festivales que siempre serán recordados por los buenos aficionados de toda la comarca. A partir de entonces Paradas empezó a ser considerada por la Prensa y crítica flamencas como  corno lugar ideal para escuchar cante, y su afición como modelo de ponderación y buen gusto.

 

Concluidos los dos de su mandato, Antonio se ve obligado contra su voluntad a continuar al frente de la Peña. En esta última etapa atraviesa la entidad una larga crisis, motivada por las dificultades económicas y la falta de apoyo de la masa social, que la abandona a su suerte, lo que motivó la suspensión de las actividades y el cierre temporal de la Peña.